Por todo el mundo es conocido el aumento demográfico del jabalí en los últimos años en toda España, achacándose fundamentalmente este hecho a que no tiene depredadores naturales, pero se me hace que es poca causa porque ya hace muchísimos años que son escasos estos depredadores.

Pienso que tiene que haber otras razones que justifiquen su explosión, su cambio de comportamiento e incluso me atrevo a decir su genética. Tras una somera revisión bibliográfica llego a la conclusión de que sencillamente está cambiando el hábitat del jabalí, sin duda debido al cambio climático, a la agricultura extensiva y a la mano del hombre. El medio natural que estamos creando se vuelve más propicio para esta especie.

Lo expuesto no solo es un problema en España; su expansión ha llegado a Suecia, Dinamarca e Inglaterra (lugares donde ya no existía), coloniza masivamente toda Europa hasta los 2.600 metros de altura en los hábitats alpinos (antes hasta los 2.000 metros). No existe en España un censo poblacional fiable y actualizado del jabalí, pero se estima el mismo en más de dos millones de ejemplares con un crecimiento exponencial superior al 10% anual.

Nuestro cambio climático, se caracteriza actualmente por unos veranos muy calurosos que comportan una gran sequía; las fuentes naturales del bosque se secan, los arroyos menguan o desaparecen también. Ya no existen charcas o balsas. Los inviernos son cortos y suaves con menos nieve y hielo; y solo puntualmente nos visitan profundas borrascas o la gota fría que nos trae lluvias torrenciales y vientos huracanados.

Este clima es quien modifica el hábitat del jabalí. Aunque encuentran su protección para la paridera y crianza en los bosques cada vez más tupidos, actualmente abandonados o poco frecuentados, éstos están resecos por falta de lluvia y carentes de alimento, lo que les obliga enseguida a ir en busca de los cultivos extensivos: huertas, cereales y frutales, donde encuentra su alimento y la tierra húmeda y fresca donde pueda hozar ya que no puede ramonear, generando un gran destrozo de estos cultivos y alarma de la Administración. Frecuentará los pocos arroyos, acequias y balsas existentes donde poder bañarse y desparasitarse.

Y dada la poca presión humana en el medio rural ya visita nuestras urbanizaciones, que antes correspondían a su hábitat, y nuestras ciudades en busca del alimento fácil de la mano del hombre o de los basureros, dándose el caso de camadas que ya nacen en condiciones urbanas.

Desde el punto de vista del cazador, el jabalí es sin duda el protagonista de batidas y monterías, por su presencia en todas ellas, por los trofeos que aporta, por el número elevado de ejemplares conseguidos y por la importante actividad económica que genera. Imposible es valorar el impacto emocional de las noches a la espera y rececho de nuestra carga genética ancestral.

Pero el jabalí actualmente es una plaga con riesgos para el ser humano y para el ganado. Con el hombre comparte la triquinosis, la hepatitis E, la salmonelosis, la Escherichia coli, Campylobacter y Leptospira…, así como también diversas virosis: encefalitis japonesa, virus Nipah, fiebre hemorrágica, etc. Con el ganado comparte la tuberculosis y la peste porcina como más destacadas. El gran temor reside en la posibilidad de que la peste porcina pase al ganado de explotación que pueda estar pastando e incluso al ubicado en las instalaciones pecuarias.

¿Quién controla actualmente la densidad poblacional del jabalí en España? Me atrevo a decir que solamente los cazadores. Se estiman, en el año 2016, se lograron 354.648 capturas en España y 4.000.000 capturas en Europa, aunque este dato no está contrastado y quizás sea aproximado dado que procede de las sociedades de caza. Pero no es suficiente.

La Administración solo favorece su caza ampliando la temporada hasta finales de marzo y concediendo permisos excepcionales por daños a las cosechas, pero sigue siendo pesada su tramitación dado que la misma lo quiere intervenir todo, se mueve con lentitud política y con disparidad autonómica.

José Antonio Ronco Lario

Médico, abogado y cazador

Fuente: https://agoratopgan.com/